ROLLITO DE CHOCOLATE CON FRUTOS SECOS (SIN AZÚCAR).

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Esta es nuestra aportación al HEMC 39, dedicado al tema "DULCES SIN AZÚCAR".

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Antes de nada, queremos decir que éste ha sido un reto para nosotros: nos hemos puesto, por unos días, en el lugar de las familias que tienen algún diabético entre sus miembros; y para ello hemos estado documentándonos e investigando las posibilidades que se nos ofrecían.

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Y así, hemos decidido adaptar un postre que normalmente preparamos para Navidad. Lógicamente, hemos cambiado los tres ingredientes que llevaban azúcar por otros que no la llevan. Sobre todo, el cambio más "radical" ha sido el de sustituir la miel por sirope de ágave. La diferencia de sabor en el resultado final es mínima. Y para ello nos sirvió de gran ayuda la información que nos da nuestra amiga Adi en su blog "Pan y varios". -

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INGREDIENTES:

- 125 g de chocolate "Valor" sin azúcar (apto para diabéticos).

- 125 g de mantequilla.

- 125 g de galletas "Natur Active" de la marca "Hacendado" sin azúcar (apta para diabéticos.)

- 3 cucharadas soperas de sirope de ágave.

- 80 g de nueces peladas.

- 40 gramos de pistachos pelados.

- 40 g de piñones pelados.

- 40 g de almendras crudas laminadas.

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PREPARACIÓN:

- Ponemos al "baño María" la mantequilla junto con el chocolate troceado, hasta que se derrita todo.

- Mezclamos todos los frutos secos en un bol grande y añadimos las 3 cucharadas de sirope de ágave.

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- Con un rulo de cocina molemos las galletas y las incorporamos al bol y las mezclamos.

- Añadimos el chocolate con la mantequilla derretidos y seguimos mezclando muy bien.

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- Cortamos 2 trozos de papel film y nos disponemos a enrollar la mitad de la masa preparada en cada uno de ellos. Los vamos moldeando con las manos para darle forma cilíndrica y apretamos los extremos del papel film, a modo de caramelos gigantes.

- Sujetamos los extremos con unas pinzas y guardamos los rollitos en el frigorífico. Nosotros los pusimos en el congelador porque estábamos ansiosos por catar el resultado. En una hora y media, estaban perfectos para cortarlos.

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Al cortarlos en rodajas, tienen toda la apariencia de unas morcillas de esas de arroz, pero no: son dulces y "sin azúcar".

La preparación, sencillísima y apenas se ensucian cacharros. Muy rápidos de hacer y buenísimos.

Una alternativa estupenda, sana y golosa para todos y, especialmente, para los niños que tengan algún problema con el azúcar; y nosotros nos damos por satisfechos con aportar este granito de arena "sin azúcar".

Se pueden hacer con tiempo y reservar en la nevera para todos los días de fiesta que se avecinan.

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